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Por José Luis Romero/Zunoticia
Huejutla, Hgo. – El jugador de origen huasteco mencionó que el fútbol de Tizayuca, Hidalgo es más estructurado y con un nivel más exigente, y desde el principio Jordi demostró que buscaba algo más, llegar al fútbol profesional.
Por sus destacadas participaciones en las diferentes ligas donde jugaba, fue invitado por las filiales de los Pumas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en Texcoco, Estado de México y viajaba de 2 a 3 horas desde Tizayuca hasta Texcoco para entrenar y buscar su sueño.
“De lunes a viernes me iba a la Secundaria de las 7:00 a las 13 horas, llegaba corriendo a la casa del profe (Cristián Osorio), y a las 14:00 horas viajaba de 2 a 3 horas hasta el Estado de México, ya que los entrenamientos comenzaban de las 16:00 a las 19:00 horas, y posteriormente viajaba de regreso a Tizayuca; y me tocó ver como golpeaban a una persona, y sufrí 2 asaltos a mano armada en los autobuses, y yo con apenas 13 años de edad”, recordó.
Jordi Hernández mencionó que regresaba de sus entrenamientos a las 23:00 horas, se bañaba, cenaba y hacía su tarea, y se dormía a las 2:00 am, y a las 7:00 am volvería a su rutina Escuela – Entrenamientos de lunes a viernes; además, refiere que era buen estudiante, y sacaba buenas notas.
Ganas de trascender: porque ni el peligro de todos los días, las horas de viaje a entrenar, cumplir con sus estudios, la soledad de estar lejos de casa y de su familia, y con solo 13 años de edad, tal parecía que nada lo detendría en su determinación por llegar al fútbol profesional (iba por buen camino) (Continuará).
