Por Enedino Hernández/Zunoticia
Huejutla, Hgo.- Previo, durante y después, integrantes de la Iglesia Católica participan en diversas actividades como son las celebraciones eucarísticas, con motivo de la XXXI Jornada Mundial del Enfermo del sábado 11 de febrero.
El responsable de la parroquia San Agustín de Macuxtepetla, Jesús Morfín Cartagena, consideró que la enfermedad es parte de la vida, “no hay nadie que diga que no se va a enfermar, todos en algún momento tenemos alguna enfermedad, por lo tanto; la iglesia los invita a ver al enfermo, a ver al necesitado, a voltear los ojos hacia aquella persona de la familia o de otras familias que necesitan de la atención”.
Expuso que oportunamente el Santo Padre Francisco, emitió un mensaje para la XXXI Jornada Mundial del Enfermo, en la cual detalla la compasión como ejercicio sinodal de sanación.
“La enfermedad forma parte de nuestra experiencia humana, pero si se vive en el aislamiento y en el abandono, si no va acompañada del cuidado y de la compasión, puede llegar a ser inhumana. Cuando caminamos juntos, es normal que alguien se sienta mal, que tenga que detenerse debido al cansancio o por algún contratiempo.
Es ahí, en esos momentos, cuando podemos ver cómo estamos caminando: si realmente caminamos juntos, o si vamos por el mismo camino, pero cada uno lo hace por su cuenta, velando por sus propios intereses y dejando que los demás ‘se las arreglen’.
Por eso, en esta XXXI Jornada Mundial del Enfermo, en pleno camino sinodal, los invito a reflexionar sobre el hecho de que, es precisamente a través de la experiencia de la fragilidad y de la enfermedad, como podemos aprender a caminar juntos según el estilo de Dios, que es cercanía, compasión y ternura” señaló.
Jesús Morfín Cartagena, comentó que actualmente todos andan buscando ver qué comprar de regalos para el Día del Amor y la Amistad, más no atendemos con amor a los hermanos enfermos, por lo que se invita a todas las personas para que participen en la XXXI Jornada Mundial del Enfermo, en las parroquias y en las comunidades, hacer oración por todos los enfermos y sobre todo, a visitarlos.
