Por Esmeralda Vargas / Zunoticia

Tianguistengo, Hgo.- En el municipio de Tianguistengo, el dulce de guayaba se ha convertido en una tradición imprescindible, especialmente durante la celebración del Día de Muertos. Este manjar, elaborado artesanalmente por manos expertas, es un símbolo de la cultura local, y este año, la señora Yolanda ha destacado como una de sus principales productoras.

“Yo aprendí a hacer este dulce desde hace 30 años. Sólo lo hago en esta temporada porque es cuando la fruta está en su punto”, comentó doña Yolanda, quien ha dedicado su vida a preservar esta costumbre. A pesar de las dificultades que ha enfrentado este año, como el calor que provocó el crecimiento de guayabas más pequeñas, la pasión por su trabajo no ha disminuido.

El proceso de elaboración del dulce es laborioso y requiere tiempo. “Es un proceso un poco tardado porque se tiene que moler en el molino de mano, después se pone a cocer a fuego muy lento junto con el azúcar”, explica doña Yolanda. Este esfuerzo se traduce en un producto de calidad que los habitantes de Tianguistengo valoran enormemente.

Este año, doña Yolanda logró elaborar solo 10 latas de sardina de su famoso dulce, pero a pesar de la limitada producción, tuvo una buena respuesta del público. Cada lata se ofreció a 200.00 pesos y se vendió sin problemas, evidenciando la demanda por este producto tan querido en la comunidad.

La tradición del dulce de guayaba no solo representa un legado culinario, sino también un vínculo cultural que une a los habitantes de Tianguistengo en estas fechas tan significativas. Sin duda, el dulce de guayaba es un elemento que no puede faltar en los altares de Día de Muertos, recordando a todos que las tradiciones se mantienen vivas a través del esfuerzo y la dedicación de quienes las preservan.