- Con limitantes, pero con orgullo, compromiso y respeto, continúan con la labor de preservar esta tradición ancestral.
Por: Marcos Sánchez Francisco/Zunoticia.
Xilitla, S.L.P.- Con orgullo, compromiso y profundo respeto por las raíces culturales, Paulino Ramírez y Claudio Cruz Muñoz, capitanes de la Danza del Maíz “Simitotilistli” o danza del Tepeyac, de la localidad de Tierra Blanca, continúan con la labor de preservar una tradición ancestral que por momentos estuvo a punto de desaparecer.
En charla con Zunoticia Digital, Paulino evoca que la danza ya existía desde la época de su abuelo y otros danzantes del pueblo, sin embargo, con el paso del tiempo y la falta de participación, la tradición se fue debilitando.

Fue hace aproximadamente once años cuando decidieron retomarla y revivir el espíritu de la danza.
Uno de los principales retos que enfrentan es la falta de vestimenta y equipo adecuado, y aunque han buscado apoyo mediante proyectos, las oportunidades aún no han llegado, “si hemos solicitado y estamos solicitando, pero no ha habido todavía nada”, y reafirma que, a pesar de las limitaciones, las ganas y el compromiso con la tradición están más vivas que nunca.
Ellos fueron entrevistados durante su participación en las recientes fiestas patronales, mencionado que participan en rituales como las fiesta del maíz, en festividades en honor a San Isidro Labrador, Xantolo, entre otras actividades culturales.
Sobre su participación en eventos públicos, ambos representantes afirmaron sentirse orgullosos, “ni vergüenza tenemos, al contrario, tenemos el valor para hacerlo”, señaló Claudio Cruz.
Reconocen, sin embargo, que existe cierta resistencia entre los jóvenes para involucrarse en estas tradiciones, “cuando van creciendo van teniendo vergüenza y ya no quieren danzar”, explicaron, atribuyendo esto al alejamiento de la cultura tradicional, de ahí que impulsan a los niños a participar.
Los danzantes portan con orgullo sus penachos, pañuelos, sonajas, bandolinas y guitarras, instrumentos esenciales que acompañan sus presentaciones y que simbolizan parte de la identidad cultural que buscan conservar.
Así, Paulino Ramírez y Claudio Cruz, son hoy referentes de una comunidad que resiste el olvido de sus costumbres, invitan a las nuevas generaciones reconectarse con sus raíces y a formar parte de esta danza que celebra la vida, la cosecha y la devoción.