Por: Marcos Sánchez Francisco/Zunoticia.

Xilitla, S.L.P.- La comunidad de La Loma, Tlaletla, puso fin a las celebraciones de Día de Muertos con la emotiva realización de la tradicional última ofrenda, una costumbre que, año con año a cierre de noviembre, reafirma la identidad y la unión de sus habitantes.
Las familias del lugar salieron a las calles portando el arco del altar que colocaron en sus hogares durante los días principales de la festividad.

Entre rezos y música tradicional, los participantes caminaron en procesión hasta un punto de encuentro donde se integraron con otro grupo del barrio, dando continuidad al antiguo rito comunitario.
En ese espacio se llevó a cabo una celebración eucarística dedicada a la memoria de quienes han fallecido. El acto cargado de solemnidad y devoción, reunió a la población en un ambiente de profundo respeto, acompañado por melodías tradicionales que aportaron un toque espiritual y festivo a la ceremonia.
Tras el servicio religioso, los asistentes compartieron alimentos como tamales, café, atole y refrescos, gesto que simboliza la convivencia y fortalece los lazos que distinguen a La Loma Tlaletla como una comunidad unida y arraigada a sus tradiciones.
Con esta última ofrenda, no solo concluye un ciclo festivo, sino que también rinde un homenaje de amor y agradecimiento a sus seres queridos fallecidos, preservando así sus raíces y reafirmando la fortaleza de su identidad cultural.