• Con o sin cargo en la administración, pero siempre disponible en cualquier horario para apoyar a la población.

Teodula Ocejo/Zunoticia

Aquismón, S.L.P.- Aunque primero inició de manera particular brindando apoyo a la gente que necesitaba sus traslados, ante el padecimiento de enfermedades y aun con los caminos en pésimas condiciones, Gregorio Rubio Huerta fue llamado por primera vez por el entonces alcalde Adán Barrios, para apoyar en las mismas labores, pero ya con mejores condiciones.

En una charla sostenida con el ahora regidor Gregorio Rubio Huerta, durante el pasado viernes, precisamente, había realizado un traslado a las cinco de la mañana desde la localidad de Tampaxal hasta el municipio de Axtla de Terrazas, en donde se esperó para trasladar de regreso al paciente de la tercera edad.

Sin embargo, asegura que estas labores se han estado implementado desde hace más de 25 años, siendo el expresidente Adán Barrios, quien se dio cuenta del esfuerzo de Rubio Huerta, para solicitarle que el trabajo lo hiciera de manera oficial y mediante las comprobaciones, apoyar con el combustible de vez en cuando, pero, además, poder conocer las condiciones de los pacientes y apoyarlos en caso necesario, trascurriendo un año de apoyo con este exfuncionario, pero de ahí, continúo colaborando con Eliseo Blanco, Eugenio Márquez, tomó una regiduría con Eliseo Blanco, participó en la Dirección de Fomento Agropecuario con Antonio Martínez Guerrero, después en el Departamento de Obras Públicas con Héctor López Balderas, y con el expresidente Víctor Martínez como auxiliar de obras, y actualmente como regidor en la actual administración, pero siempre disponible en cualquier horario para apoyar a la población.

Comenta que dentro de sus experiencias, gestionó con el expresidente Adán Barrios, con Olimpo Palacios como coordinador de Desarrollo Social, el depósito de agua que se encuentra en la entrada de la localidad de Tampaxal, pero lo que más lo ha marcado dentro de las experiencias, es que dentro de los pacientes con mordedura de víboras, quebraduras y otras enfermedades, así como embarazadas, fue cuando una de estas dio a luz en su unidad vehicular “afortunadamente venía la partera, la señora venía desde La Palma, Xilitla, por este lado de Tampaxal, cuando al ir bajando por San Isidro, dijo la partera que ya se iba a aliviar, solo me orillé en una sombra, y como la partera dijo que no había necesidad de trasladarlo hasta valles y los familiares estuvieron de acuerdo, ya solo nos regresamos a San José de Oija y ahí reposo con unas familias”, dijo.

Sin embargo, también tuvo que vivir la muerte de un paciente “lo traía en el traslado, cuando también ahí por San Isidro puso su sombrero en el piso de la camioneta y cuando se lo quiso volver a poner ya no pudo, ahí don Delfino Mendoza, que en paz descanse, se recargó en mi hombro como si se hubiera desmayado, y cuando llegamos al Centro de Salud que antes estaba por la ganadera, lo metieron, y cuando salió el doctor me preguntó que cuándo se había desmayado el señor, que porque en ese momento había fallecido, tenía 45 minutos de haber muerto”.

Aclaró que, sin embargo, durante estas incidencias no se tenían tantos problemas, ya que, ante el mal estado de los caminos, sabían que no podrían llegar a los lugares “ahora son otras las condiciones, ya los caminos están mucho mejor, hay clínicas más cerca, a veces no hay médicos o medicamento, pero hay atención más cercana que antes”, dijo.

También recuerda como con palos hicieron una camilla, sacaron a una mujer caminando más de una hora, tras haber dado a luz a sus gemelos, pero se había agravado, logrando afortunadamente salvar su vida, así como estas, son muchas las historias que guarda en su memoria, y que lo impulsan a seguir apoyando desde cualquier trinchera y a cualquier hora a la población.