Por Salvador Altamirano/Zunoticia
Huejutla, Hgo.- Nadie sabe quién la colocó ni por qué en el lugar donde se encuentra desde pretéritos años, inmemorables, generando en las personas admiración, y si fue labrada por la naturaleza o la mano del hombre.
Está en el límite del Ejido de Teacal y del antiguo Barrio El Potrero, hoy San José, un enorme pedrusco de forma alargada conocido como la “Piedra Parada”, la cual es uno de los atractivos de la zona que es muy comentado por la gente, ya que es un singular referente limítrofe.
La versión más popular es que en el Huejutla de antaño servía de límite en una propiedad del histórico sastre Manuel Zerón Sánchez, el “Many”; que después perteneció a don Melitón Ángeles, el huarachero, y actualmente está en la esquina de un solar, de la calle Prolongación Toribio Reyes.
Refieren moradores que antes la Piedra Parada servía como punto de partida a la vereda que conducía a la comunidad de Los Horcones, senda ahora casi en desuso, ya que solo la utilizan los propietarios de parcelas y milpas de la comunidad de Teacal.
Comentaron que también por esa vereda, que surca las lomas aledañas a la Piedra Parada, antes se caminaba a pie o a caballo para arribar a los pueblos de Chiconamel o Tancazahuela, del Veracruz, así como varios ranchos ganaderos que por ese rumbo habían antes de las invasiones agrarias.