• LA ALCALDESA de San Felipe Orizantlán, Erika Saab Lara, tiene un plan de bien vivir para San Felipe en cabecera.
• La fémina que gobierna ha buscado consensos, diálogos incansables con los comerciantes de la cabecera municipal para que puedan ver que es necesario le entreguen a la sociedad esos espacios que tomaron y que mantienen como rehén.
• Si quieren a su pueblo deben entender que a donde vaya el comercio y el transporte habrá apertura comercial, no es necesario descubrir el hilo negro, la alcaldesa quiere concientizar a su pueblo de hacer un gran pacto con la cabecera municipal, considerando que seguramente el pueblo les va a reconocer cuando se actúa con la razón.
• Urge ver a San Felipe libre de comerciantes para admirar la imagen de su plaza, es necesario que el sentimiento de pertenencia también se actúe en los hechos y puedan cuando menos hacer el intento de instalarse en el nuevo mercado municipal buscando que funcione.
• UN PERCANCE carretero de una unidad de transporte comunal indígena irregular o “tolerado”, de Chiatipan, generó 17 lesionados, tres de ellos de gravedad, primero la unidad estaquitas iba a exceso de velocidad y llevaba exceso de pasaje, esas unidades no pueden rebasar 13 personas de cupo, pero como el programa federal Tianguis del Bienestar que fue entregado en Huazalingo cabecera, en la comunidad llena a todos de emoción pues creían les iban a dar productos a gran escala, les dieron una tela, guantes para lavar, una taza con plato, pilas, entre otros enseres que para las familias vulnerables representa mucho.
• La gente bajó en camionetas de pasaje y como es tradición, el pueblo se llenó de ciudadanos de las comunidades, fue así que un percance marca la diferencia y expone un tema histórico del transporte irregular, que a nadie nos suena anormal aquí, pues eso es historia y además pues las unidades las autorizan delegados comunitarios, no la autoridad de la Secretaría de Movilidad y Transporte, SEMOT.
• Chiatipán era miembro de la Organización de Pueblos Indígenas y Campesinos, donde no solo están organizados, sino que cuentan con un plan de ahorro en caso de desastre, pero la CNC y otras organizaciones se han disputado al transporte irregular y eso se ha convertido en un dragón de 7 cabezas, donde impera la fuerza, el amago, el chantaje, la muchedumbre de un pueblo y los usos y costumbres, menos la autoridad reguladora.
• En tiempos de Francisco Olvera Ruiz al menos trataron de poner orden, de instalar los cajones que hoy ocupan y que poco a poco se han ido saliendo del orden, los responsables de la coordinación regional duraban, porque tomaban decisiones, creaban círculo de comunicación, se establecían acuerdos y definían estrategias; en tiempos de Omar Fayad dónde era hablar de transparencia y legalidad, pero solo en la región de Huejutla al menos seis funcionarios desfilaron en servicio de revista y cobro de placas, pero quizá faltó más estrategia y regularización.
• Hoy como en el sexenio anterior estatal, hay un apartado de la Ley Comunal Indígena, una propuesta regulada que hace falta ampliar en la legislación local, pero si el que tenemos de diputado es un vendedor de concesiones, si nuestro representante legislativo es el que toda su vida promovió el desorden, encabezó grupos de porros y vándalos, pues con esa historia que se puede hacer.
• De acuerdo a los que les incumplió con los principios básico de la filosofía de Andrés Manuel López Obrador, difícilmente podrá recuperar la imagen con el que inició a caminar con una intervención pública y social que le permitió en el anterior régimen, alcanzar la curul por palomeo político y no por tener el perfil congruente con la sociedad.
• Difícil pero no menos importantes las decisiones de la titular del transporte y su director Víctor Guerrero.
