• ESTAMOS en pleno invierno y con ello el COVID, influenza y sus mutantes presentes, de regreso a las regiones frías del país y el mundo; no hay manera de evadir esta nueva responsabilidad en materia de salud y social.
• Desde noviembre del año pasado la Secretaría de Salud y el Instituto Mexicano del Seguro Social emitieron las recomendaciones para extremar precauciones, ponerse la vacuna trivalente y proteger a las personas con alguna comorbilidad, adultos mayores, pues las enfermedades más peligrosas de la época ya no se van a ir, son parte de nuestra vida diaria.
• El regreso del uso del cubrebocas es opcional, si bien no hay una ley que lo obliga, si existe una responsabilidad de cuidar nuestra salud y la de nuestra familia, eso conlleva el tomar decisiones en pro de la sanitización, como el regreso del gel sanitizante en edificios y espacios cerrados.
• Tenemos dos años de experiencia directa con el COVID, muchos momentos difíciles y ya vamos por el cuarto año desde el brote, pero también al menos catorce años desde el brote de influenza peligrosa que nos impactó y con ambas enfermedades la vida nos cambió; por eso a estas alturas de esa pandemia, la responsabilidad compartida no es un tema único del gobierno, nos involucra como sociedad.
• EL CENTRO de Matanza de Huejutla se supone está siendo atendido, y ahora Salatiel Domínguez fue enviado a resolver tan profundo problema de salud pública que no es un tema de pintura y cemento, las normas sanitarias para un rastro municipal son las mismas que las de un Rastro tipo Inspección Federal, manejo de productos cárnico es el mismo rigor sanitario para comercialización y traslado, de ahí lo importante no solo la modernización en Huejutla, sino el buscar dar el paso para cumplir con los estándares sanitarios.
• Pero no es un tema de Huejutla únicamente, si eso es la ciudad de Huejutla en cuanto a rastro, en salud pública es un todo, carne, agua, drenajes y esa negligencia es general en los municipios huastecos y serranos; cómo encontramos próximos gobiernos consientes de que esto debe cambiar, encontrar respuestas a los grandes problemas de las regiones es sin duda contar con gobiernos sensibles que puedan ir resolviendo tanto olvido.
• SERGIO BACA Olivo, le suena el nombre del agente del ministerio público, trae un historial de corrupción desde la administración pasada que no puede ni andar, es obvio que el tema del MP de Zacualtipán es un botón de muestra de lo que hizo cuando estaba en Huejutla, que hay una trayectoria obscura en la que el funcionario no es único, que hay un entramado que opera y sirve a los privilegios, que se mantiene esa coyuntura en algunos asuntos que se volverán visibles.
• Los ciudadanos no van a quitar el dedo de la llaga, se trata de un escenario social que en el pasado era cotidiano el uso de las estructuras de la función pública para el servicio de particulares, sino se termina con esto de raíz, esto seguirá un curso inesperado, lo importante es que brota en un momento adecuado y esto es parte de lo que vivió Hidalgo en muchos años, hoy es cuestión de limpieza.
• ALGO PARECIDO está por brotar en la escuela primaria José Vasconcelos de la colonia Loma Bonita, los padres de familia sostuvieron reunión y escudriñan recursos públicos de los Programas Federales Bienestar, La Escuela es Nuestra, donde el director y otros están siendo evaluados, pues hay cosas que simplemente no cuadran, obras que aparecen en papel, pero que no se ven, la comunidad ya está encima de esto y parece solo es cuestión de tiempo, se trata de una tira de la madeja, pues hay viene el resto en comunidades y demás escenarios nada agradables.
• Pronto veremos cómo viene esa evaluación obligada de los funcionarios públicos, los programas del presidente de México Andrés Manuel López Obrador están diseñados para atender al pueblo, en infraestructura educativa, en alimentación, educación, pero no para que los funcionarios y directores de la escuela metan mano y ejecuten acciones en lo particular.
